sábado, 10 de septiembre de 2011

ETERNO. CAP. 3.- USTREL


CAP. 3.- USTREL


La calle estaba llena de gente. Los camiones de reparto, se agolpaban para aparcar en la zona de carga y descarga. Los estudiantes se dirigían a toda prisa a clase, ya eran casi más de las 9 de la mañana. Me sentí extraña, como nunca antes. Nunca se me paso por la cabeza que un día, tendría que dejar Santiago, dejar mis estudios, mi vida, para protegerme de algo o alguien que no sabia que o quien era. Sentí una como las ganas de llorar me abrasaban la garganta, aguante todo lo que nunca había aguantada, para no darme la vuelta y encerrarme en casa y no salir nunca de allí.

Ustrel me cogió discretamente del brazo y me guió calle arriba.

- Tenemos que coger el autobús... ¿a donde vamos a ir?

Ustrel sonrió... Creo que si alguien más hubiese visto esa sonrisa hubiese muerto de miedo. Nunca vi unos dientes tan blancos y una dentadura tan perfecta como la él.

- Vamos a ir caminando.
-¿Caminando? Entonces es cerca.
Volvió a sonreír y siguió caminando sin mirar atrás.

- Ustrel! ¿a donde me llevas? Si voy a ir contigo, al menos tengo derecho a saber hacia donde nos dirigimos no?

- No puedo decírtelo, es por tu seguridad.

Empezaba a estar harta de "mi seguridad" ¿Acaso no sabia cuidarme yo solita? No era una niña!

- No me moveré de aquí si no me dices a donde nos dirigimos.

Su mirada fue como un puñal congelado que entro en lo más profundo de mi ser. El miedo me paralizó. Solo recuerdo que apretó más fuerte mi brazo e hizo que le siguiera, como hipnotizada por esa fría expresión.
Pasamos por un montón de calles, nos dirigíamos a las afueras de la ciudad. Pasamos justo enfrente de la finca donde vivía Pipo, desee que saliese corriendo de allí y destrozase a aquel ser demoníaco para liberarme de él. Subíamos hacia la ciudad de la cultura, pero antes de llegar alli, nos adentramos en un camino que llevaba al monte. Empece a sentir pánico. No estaba completamente segura de que todo esto no fuese una trampa, un secuestro... tenia miedo, mucho miedo. Mi corazón latía a toda prisa, sentí que mi cuerpo no era dueño de mis movimientos, que era una marioneta, una desconocida para mi... me sentí desvinculada por completo de mi cuerpo y mi alma... Cuando recobré el conocimiento, ya estábamos lejos de Santiago de Compostela.

...

Escuchaba sus pensamientos, sabia que la pobre chica estaba muerta de miedo. Era realmente hermosa. Su piel era suave y firme. Su olor no paraba de tentarle y creía que enloquecería de un momento a otro, cada vez que ella paraba para atarse bien su cabello en una alta coleta. Sus ojos eran extrañamente atrayentes, era normal en su condición. Había conocido a pocos como ella y sabia de sobra, que eran seres realmente especiales, solo fruto de aquella unión tan extraña. Sentía su sangre fluir por sus venas y en muchas ocasiones tuvo que parar y soltarla para controlarse.

Se dirigían por el camino inglés hacia Coruña, todo a través de los bosques, pues el no sabia otra manera de protegerla que llevarla por los lugares donde el se encontraba más cómodo, era su territorio. Toda su vida, desde que tiene recuerdos, ha caminado por los bosques, montañas y parajes olvidados, alejados del mundanal ruido y de la tentación humana.

Desde hacia un par de horas, algo los seguía. Un animal, probablemente un perro abandonado que al ver humanos, les seguía en busca de comida.

Llegaron a un claro en medio del bosque. A la sombra de los árboles pudo ver al perro que les seguía, era un pastor alemán enorme. Al cruzar sus miradas, el perro se acerco con el rabo entre las piernas y empezó, lentamente a olisquearlos. Cuando vio que el perro hacia carantoñas al olerla a ella, supo de inmediato que se trataba de su perro Pipo. Pensó que no sería un estorbo ya que el podría vigilarla, mientras el iba de caza.

Gabrielle llevaba ya 3 horas inconsciente. Su pecho subía y bajaba armoniosamente. Era realmente tentadora, hermosa. El pelo le caía por la cara desordenadamente y su cuello desnudo era tan perfecto que llamaba a su puerta a gritos. Ustrel intento despejar su mente, tenia que llevarla sana y salva, tenia que llegar bien, sin saber que era y a que había dedicado su vida todo este tiempo. Tenia que seguir siendo un extraño para ella. Pero era tan bella, su cuerpo tendido en la hierba tenia esa forma tan perfecta, con sus delicadas manos posadas en su estomago. La camiseta, ligeramente levantada dejaba ver parte de su piel desnuda... Enfadado, dio un fuerte golpe en el suelo y salio a cazar antes de que su mente le traicionase.

Se sumergió en la oscuridad del bosque mientras Gabrielle, inocente e ignorante a su destino, dormía sin saber que en un par de horas, su vida daría un giro y cambiaría para siempre.


...

Me desperté. Sentí la nariz húmeda de un animal olisqueandome la cara. Al abrir los ojos vi a Pipo. Sentí tanta alegría que me levante de golpe pensando que estaba en casa, y que todo había sido un mal sueño. Pero, era demasiado bueno, para ser real. Si, era Pipo, pero no estábamos en casa. Estábamos en el claro de un bosque. No podía ver mucho más allá de mi nariz. Estaba todo oscuro. El cielo, nublado y una niebla fantasmal cubrían todo el bosque. Pipo, jugaba haciendo carantoñas para que le siguiese, pero no podía moverme. Mis piernas me temblaban como si hubiese corrido una maratón. Escuche el crujir de una rama detrás mía y Pipo, empezó a aullar. Volvería a desmayarme, estaba segura!

Sentí que alguien me tocaba el hombro y pegue un salto mientras gritaba aterrorizada.

- Soy, yo, soy yo. Tranquila.

Ustrel, me miraba, divertido, ya no tenia esa sonrisa amenazadora. Sus manos estaban llenas de conejos cogidos por las patas traseras. Las alzo y me dijo:

- Traigo la cena!

Sonreí... vale, si, forzadamente pero sonreí. A Ustrel pareció molestarle mi desconfianza y volvió a ponerse muy serio.

- ¿Donde estamos?
- En bosque.
- Si, de eso ya me había percatado.
- Pues entonces no preguntes.

Se acuclillo en el suelo y empezó a frotar unas ramitas, al cabo de unos segundos empezó a arder un pequeño manojo de hierbajos que había colocado a modo de hoguera. Incrusto dos conejos perfectamente despellejados.en dos palos y los puso al fuego para que se asasen.

- Dentro de un momento estará la cena.

Se dio la vuelta, se sentó en la oscuridad y cerro los ojos.
Me senté cerca de Pipo mientras lo acariciaba y veía como el fuego iba chamuscando lentamente la piel desnuda de los pobres animales

-Estamos en las inmediaciones de Cerceda. Mañana llegaremos a Coruña. Tengo que arreglar un asunto allí. Supongo que estaremos un par de días, después nos volveremos a poner en marcha.

Me miraba... me miraba como si sacase una radiografía de mi cuerpo. Me hacia sentir incomoda. Solo pude susurrar un débil "Gracias" y en respuesta me sonrió. Era extrañamente guapo, tenia algo que hacia que sintieses escalofríos, cada vez que me tocaba la piel sentía como si me quemase con su piel fría.
Se abrió un claro en el cielo y la Luna dejo que le viese el rostro. Parecía hipnotizado por mi presencia. No paraba de mirarme ansioso, deseoso. Sentí que algo malo iba a pasar. A Pipo se le empezaron a erizar los pelos de la cruz y en menos de un abrir y cerrar de ojos, tenia a Ustrel encima mía. Pipo había desaparecido. Sentía su gélido aliento sobre mi rostro y su mirada me desnudaba sin compasión. Y entonces lo sentí, sentí que mi corazón latía y latía sin poder parar, como si mis costillas fuesen su cárcel e intensase liberarse de ellas, chocaba contra mi pecho y volvía a chocar.

- Ustrel, me haces daño, por favor.

Mis lagrimas recorrían mi rostro y pude sentir sus labios recogiéndolas y saboreandolas mientras sus manos sujetaban fuertemente mis muñecas.

- Lo siento Gabrielle, no puedo resistirme.

Sentí miedo, lo peor estaba por pasar y yo no tenia fuerzas para librarme de su cuerpo y entonces, mi instinto me obligo a hacer algo que nunca habría hecho. Le mordí, le mordí tan fuerte que sentí como su sangre llenaba mi boca. De un salto desapareció, adentrándose en el bosque y escupí ese desagradable sabor... ¿Desagradable? Su sabor metalizado me estaba gustando, su olor era como aquel aroma que sentí esta mañana al salir de mi portal... relami lo que me quedó en los labios y por un momento desee que volviese. Vi sus ojos entre la oscuridad y de repente volví en mi.

Volví a escupir. Pipo, estaba allí otra vez, se acurruco a mi lado y apoyo su cabeza en mi brazo.

- Lo siento Gab...

Escuche su susurro de entre las ramas de una silva. Poco a poco se fue acercando a mi y cuando llegó a mi lado, acarició suavemente mi mejilla con las yemas de sus dedos gélidos. Nos quedamos los dos paralizados y lentamente acerco sus labios a los míos... me aparte lentamente y con mis dedos, acaricie sus labios y después su cuello, donde le había mordido... ya no sangraba, ya no tenia ni rastro de lo que mi boca había hecho. Me cogió la mano, la guió hasta su pecho y me dijo:

- No tengo nada que ofrecerte, salvo la protección que me han encomendado.
- ¿Por qué todo el mundo cree que no puedo protegerme yo sola?
- Gab... es más complicado de lo que crees, la amenaza de la que te estoy protegiendo...
- ¿Si?

Lo miré curiosa y ansiosa de respuesta. Guió mi mano a mi corazón y la dejo ahí, mientras soltaba lentamente su mano de la mía.

- Las respuestas que buscas están ahi Gab...

Me miro se acerco a mi mejilla y me beso tiernamente, con sus labios fríos... pero extrañamente yo sentí calor. Un calor que recorrió todo mi cuerpo y que me hizo temblar.

- ¿Quien eres Ustrel?
- No soy más que un alma perdida Gab, sólo eso.

Se levanto y fue hacia el fuego. Movió los conejos para que se terminasen de cocinar. Se alejo y volvió a sentarse lejos, en la oscuridad, pero todavía observándome.


CONTINUARÁ...

MARTASKY


Bueno gente! Aquí esta el capitulo 3 de Eterno, espero que os este gustando. ¿Que os ha parecido? ¿Os esta gustando? Dandme vuestra opinión. Me disculpo de nuevo por no haber subido ayer el capitulo. No tuve mucho tiempo. Pero ya veis, siempre que puedo, aquí estoy con un capitulo más!

Como siempre, os dejo una imagen de Victoria Frances.

Un beso a todos!! Y GRACIAS POR LEERME ;)

4 comentarios:

  1. Bueno cm querías un comen sustancioso te diré q Coruña y Santiago no los veo cm pa una historia vampirica,un bus no pinta nada xD y un vampiro estudioso no lo veo,por el resto me gusta.

    ResponderEliminar
  2. Jajajaja Gracias Paulygna! Contestando a tu comentario, te dire, que Santiago y Coruña son en esta historia "Ciudades dormitorio" A Santiago se le puede exprimir bastante, ya q la zona vieja y ciertos lugares de la ciudad tienen historia para dar y tomar, no es sólo el contenido Vampirico, mi historia comienza en Galicia, porq queria que formase parte de lo que para mi es Galicia. Lo del Bus jajaja un simple medio de transporte, precisamente por eso no lo usan van a pie por el bosque, como animales, nómadas... lo que quieras. ¿Y quien dijo algo de un vampiro? Un vampiro estudioso? No dije nada de un vampiro que estudiase jejeje!! Me alegro que te este gustando y muchas gracias por comentar!! Sigue asi, me ayudas mogollón!!! Bikos!

    ResponderEliminar
  3. Yo tenia entendido q iba de vampiros..,xDD

    ResponderEliminar
  4. Bua martasky , ya me he enganchado jajajja estoy deseando que hagas otro capitulo jajaja
    Y bueno ,es algo parecida a una saga que yo me se... pero esta muy bien ,y podrias ponerlo en una pagina de libros y hacer tu propio libro, y ser escritora jajaaj

    ResponderEliminar